Contextualizaremos los hechos que tuvieron lugar el caluroso enero
de 1989, cuando un grupo político de extrema izquierda irrumpió con armas la
guarnición militar en pos de "defender la democracia" amenazada por
los carapintadas al mando de Aldo Rico y Mohamed Alí Seineldín.
Compararemos diversas
visiones de los principales diarios porteños, opiniones de periodistas,
referentes políticos y su devenir histórico.
También expondremos la
actualidad de los juicios que se están dando en el marco de crímenes de lesa
humanidad por parte de las Fuerzas Armadas.
Además, fruto de esta
investigación periodística, aportaremos pruebas a las causas por desapariciones
en democracia que se dieron en el sangriento combate, donde el Ejercito
Argentino exterminó con saña el último movimiento guerrillero con
reminiscencias de los `70.
El poder ejecutivo nacional a cargo de Raúl
Alfonsín impulsó el juicio a las Juntas Militares en 1985. Se condenó a los
militares de más alto rango que habían dado el golpe militar el 24 de marzo1976.
Si bien fueron juzgados y condenados los
superiores, los subalternos participes de los crímenes de la dictadura debían
también ir presos de acuerdo con el pedido de las organizaciones de defensa de
los Derechos Humanos.
En este clima de tensión, el gobierno
constitucional debía enfrentarse con las Fuerzas Armadas que funcionaban de
igual forma que antes del 10 de diciembre de 1983.
La Casa está en orden
El
Presidente Raúl Alfonsín negoció con los militares carapintadas sublevados, dirigidos por Aldo Rico y Mohamed Alí
Seineldín para que se cesen las hostilidades en las pascuas del ´87. Parte de
lo acordado fue la sanción por parte del ejecutivo de las Leyes de Obediencia
de Vida y Punto Final.